La fragmentación del ADN en los espermatozoides hace referencia a las rupturas o daños presentes en la estructura del ADN dentro de los espermatozoides.. Estas rupturas en la cadena de ADN pueden afectar negativamente la fertilidad masculina, ya que los espermatozoides con alto nivel de fragmentación tienen menor capacidad para fecundar un óvulo y, si lo logran, hay un mayor riesgo de fallos en la implantación, abortos espontáneos y problemas en el desarrollo embrionario.
Los espermatozoides pueden tener más de un 35% de fragmentación en su ADN, incluso en los hombres más sanos con un seminograma normal..
La integridad del ADN espermático es clave para obtener embriones viables y posteriormente un bebé sano.
Por ello, es importante evaluar la fragmentación del ADN espermático para su diagnóstico y tratamiento de la infertilidad masculina, especialmente en casos de infertilidad inexplicada o fallos repetidos de fertilización. En esos casos, si tras un análisis de la fragmentación, tenemos un porcentaje elevado, es imprescindible realizar un procesamiento que nos seleccione espermatozoides sanos con un bajo porcentaje de fragmentación, es decir, con un bajo porcentaje de rupturas o daños en el ADN.